5 Libros encontrados
Sánchez Buendía, Sara
Todo el lío empezó cuando mi mejor amigo, Walter, aceptó el reto de Raúl Rodríguez, el cachas fanfarrón del cole. Y pasó lo que tenía que pasar, o mejor dicho, lo único que no debería haber pasado nunca. Raúl acabó con la pierna escayolada y Walter y yo t
Has añadido la cantidad máxima disponible.
Sánchez Buendía, Sara
Hi ha un nen nou a la classe de quart. Té un nom estrany i sembla avergonyit quan tothom el mira. Això sí, ningú sap si s'ha posat vermell, perquè l'Uhrq té una altra raresa a més del nom: és de color verd!
Has añadido la cantidad máxima disponible.
Sánchez Buendía, Sara
Hi ha un nen nou a la classe de quart. Té un nom estrany i sembla avergonyit quan tothom el mira. Això sí, ningú sap si s'ha posat vermell, perquè l'Uhrq té una altra raresa a més del nom: és de color verd!
Has añadido la cantidad máxima disponible.
Sánchez Buendía, Sara
Aunque Bel nunca ha tenido problemas para sacar adelante sus estudios, justo ahora, a punto de acabar el Bachillerato, no solo ha suspendido varias asignaturas, sino que además acumula faltas de asistencia sin justificar. Se mantiene encerrada en sí misma y nadie logra explicarse su actitud: ni su madre, ni la jefa de estudios del instituto… ni siquiera Paz, su mejor amiga. Pero poco antes de Navidad, cuando está a punto de ser expulsada y arruinarse definitivamente el curso y su futuro, ocurre algo que parece sacudirla de su indiferencia: y es que en el instituto comienza a correr el absurdo rumor de que se aparece un fantasma. Algunas compañeras cuentan haber presenciado fenómenos extraños y pronto alguien trae a colación una vieja leyenda urbana: por lo visto, desde siempre se ha hablado de un espíritu que se aparece en el barrio... un espíritu que, tras muchos años dormido, ha vuelto en busca de algo.
Has añadido la cantidad máxima disponible.
Sánchez Buendía, Sara
Me encanta el Toyota. No hace ningún ruido cuando lo aparcas, ni aunque mi madre esté maniobrando quince minutos. Pero aunque soy un fan total del Toyota, tengo claro que, por bueno que sea, un coche no es un sitio para vivir. Por eso no entiendo aún qué está pasando. No entiendo qué hace la abuela abajo, en el aparcamiento del edificio, negándose a salir, atrincherada en el coche. Aunque sea el Toyota. Además, parece muy tranquila. Y eso nos pone a nosotros (a mis hermanas y a mí) más nerviosos, porque sabemos lo terca que puede llegar a ser mi abuela a pesar de su buen carácter.
Agotado ahora
Has añadido la cantidad máxima disponible.